La historia reciente chaquetillas de cocinero me recuerda a la de la ropa de tenis. Hace unos años, ni tenistas ni chefs de renombre podían imaginar llevar una indumentaria que no fuera blanca. En tenis la ropa imprescindible eran el polo, pantalón corto, calcetines y zapatillas blanco inmaculado. Incluso la cinta del pelo que llevaban algunos tenistas, era blanca. Y en la cocina clásica igual, las chaquetillas blancas impolutas eran el uniforme de cualquier chef de bien.
Pero las cosas han cambiado, en el tenis creo recordar que fue Agassi el que popuarizó esta tendencia. En la cocina Alberto Chicote, con las coloridas chaquetillas de Agatha Ruiz de la Prada ha hecho lo propio.