Entre mis recuerdos de infancia en la cocina está el mortero amarillo de Manises con su maza de madera. Este es un mortero típico en toda la España que seguro que las abuelas de nuestras abuelas ya utilizaban.
Así que cuando crecí este fue el primer mortero que compré hasta que un día vi a Jamie Oliver con un mortero de granito y por alguna razón entendí que ese debía ir mejor. Así que no paré hasta que conseguí uno y estaba en lo cierto: los morteros de piedra van mejor. La clave es el peso de la maza y la dureza de los materiales. Consigues desmenuzar cualquier alimento con menos esfuerzo.