Seguramente no descubro nada al afirmar que los cuchillos japoneses son totalmente diferentes de los occidentales. Pero no sólo son incomparables en su forma, sino que también lo son en su fabricación, y el cuchillo Yanagiba no es una excepción.
Si queremos un cuchillo japonés no sólo por su forma, sino por su precisión y sus famosas hojas afiladas, lo mejor será comprar uno procedente de ese país. La mayoría de cuchillos occidentales están hechos cortando una hoja de acero, mientras que los japoneses están hechos de acero fundido martillado. Los más preciados se siguen haciendo a mano y eso les otorga una flexibilidad y dureza de la que los europeos carecen.
El cuchillo Yanagiba tiene de media una largada de entre 21 y 25 centímetros y los cuchillos tradicionales sólo están afilados por un lado de la hoja, aunque en Europa se pueden encontrar cuchillos afilados por ambos lados. Tiene forma de hoja de sauce y está pensado para hacer los cortes limpios y precisos que se requieren para filetear el pescado y hacer sushi o sashimi.
El cuchillo Yanagiba es un cuchillo muy específico que por sus características es mejor utilizarlo únicamente para lo que ha sido diseñado: cortar pescado para hacer sushi o sashimi, pero no por ello es menos necesario para todo aquel aficionado a la cocina japonesa.
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