Mis ancestros italianos imaginarios me dijeron que para medir la cantidad de pasta corta correcta (macarrones, espirales, lacitos), lo que había que hacer era llenar un plato de pasta y echarlo en la olla de agua hirviendo, echando tantos platos como comensales. El problema viene cuando lo que vamos a preparar son espaguetis o tallarines que no se pueden medir con este método.
Por suerte existen en el mercado medidores de pasta como el que os enseñábamos el año pasado o el que veis sobre estas líneas, el medidor de pasta Kikkerland, un libro con circunferencias que os puede ayudar a decidir la cantidad de espaguetis que debemos echar a la olla. La ventaja que tiene sobre otros medidores de pasta es que abulta poco (cosa que seguro que os gustará más a vosotros que a los bichos que habitan vuestros muebles de la cocina).
Me gusta también que tenga varios dibujos distintos porque se presta a inventarte una historia sobre sus personajes, como que la niña pequeña ha invitado a espaguetis a medio barrio (¡menos mal que se cocinan rápido!). Sus medidas son 9×9 y 3 centímetros de ancho, así que os cabe en cualquier hueco.
Precio 10,66 €
Comprar medidor de espaguetis Kikkerland
Enlace | Web Kikkerland
¡que salao!
Gracias Sonia 😀