
Tengo una manía y es que siempre como los tomates pelados. Comer los tomates con piel o sin piel son dos experiencias totalmente distintas. Los tomates siempre mejor comerlos pelados, no solo para hacer salsas o concassé, sino también para las ensaladas o en cualquier receta que lo incorpora como ingrediente. Pero pelar tomates es tan complicado, que siempre soñé con un pelatomates.
Manera tradicional de pelar un tomate
No sé si habéis probado las distintas técnicas que recomiendan para pelar un tomate. Si no lo habéis hecho, tenéis que saber que la más “rápida” recomienda escaldar los tomates. Esto es, poner los tomates entre 30 seg y 1 min en agua hirviendo, habiendo les hecho previamente unos cortes en forma de cruz en la piel.
El pelatomates
Como soy un poco perezosa y optimista, siempre he creído que tenía que haber otra forma y no he parado en búsqueda hasta encontrar: el pelatomates.
En cuanto ví el pelatomates en mi tienda habitual de utensilios de cocina no me pude resistir y lo compré. De apariencia, es como el típico pelapatatas de toda la vida, en color rojo normalmente, y al con unas cuchillas mucho más afiladas que sirven para pelar todas las frutas de piel suave, y en especial el tomate.
Enseguida que lo tuve, lo probé y me gustó tanto que por navidad compré pelatomates para toda la familia. Es rápido, limpio y sencillo. Para usarlo, sólo hay que sacarle el protector, limpiar los tomates y empezar a pelar. Así que la olla para escaldar los tomates ha quedado desterrada en mi casa.
¿Vosotros seguís escaldando los tomates? ¿Os pasaréis al pelatomates?
Comprar un pelatomates